La EMV es la encargada de promover el concurso de 106 viviendas económicas y sostenibles en Vallecas
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En un sector degradado del distrito de Madrid, la convocatoria del concurso asigna estas viviendas al alquiler para jóvenes, en una zona que enfrenta desafíos significativos de deterioro urbano. El objetivo es revitalizar la zona, dotándola de una infraestructura moderna y sostenible, con sistemas e instalaciones altamente eficientes desde el punto de vista energético. Esta iniciativa busca no solo ofrecer vivienda asequible, sino también mejorar la calidad de vida de los residentes y promover el desarrollo sostenible en la comunidad.
“Se dice que las almas errantes observan lo que ocurre en los lugares que recorren. Como una gran caja de habitar donde se mira sin ser visto, ajenos aquellos paseantes que con sus actos y malabares son ignorantes de tal vigía de sus andares”.
José María Carrillo Rodríguez
Concepto
“Si eliminamos de nuestros corazones y mentes todo concepto muerto con respecto a las casas y examinamos la cuestión desde un punto de vista crítico y objetivo, llegaremos a la casa máquina, la casa producida en serie, saludables incluso desde el punto de vista moral y hermosas tal y como lo son los instrumentos y herramientas de trabajo que acompañan nuestra existencia”.
Le Corbusier. Vers une architecture. 1923.
El edificio de las 106 viviendas económicas se organiza en ocho plantas además de una planta de ático, con tres sótanos destinados a plazas de aparcamiento. Su volumen se encuentra adyacente a la calle Martínez de la Riva, ocupando toda la extensión de la parcela asignada para el proyecto en el barrio de Vallecas en Madrid. Esta distribución permite aprovechar al máximo el espacio disponible y garantizar una adecuada capacidad habitacional en una zona con alta demanda de vivienda asequible.
Exterior
El edificio de las 106 viviendas económicas se ha diseñado con una distribución que abarca ocho plantas, además de una planta de ático y tres sótanos dedicados al estacionamiento. Esta disposición permite optimizar el uso del espacio disponible en la parcela asignada en el barrio de Vallecas en Madrid, aprovechando al máximo su extensión. Al estar situado junto a la calle Martínez de la Riva, el edificio ocupa una posición estratégica que facilita el acceso a servicios y transporte público, lo que lo convierte en una opción habitacional conveniente para los residentes.
Además, la inclusión de tres sótanos para estacionamiento contribuye a aliviar la presión sobre el aparcamiento en la zona, proporcionando una solución integral para las necesidades de movilidad de los habitantes.o de las 106 viviendas económicas se organiza en ocho plantas además de una planta de ático, con tres sótanos destinados a plazas de aparcamiento. Su volumen se encuentra adyacente a la calle Martínez de la Riva, ocupando toda la extensión de la parcela asignada para el proyecto en el barrio de Vallecas en Madrid. Esta distribución permite aprovechar al máximo el espacio disponible y garantizar una adecuada capacidad habitacional en una zona con alta demanda de vivienda asequible.
El edificio determina su singularidad por tener una apariencia industrial, resultado de los materiales escogidos como acabados: hormigón pulido de color en el suelo de los espacios comunes, fachadas terminadas en materiales metálicos o prefabricados.
En las 106 viviendas económicas y sostenibles en Madrid se plantea dos soluciones de fachada muy diferentes entre sí en los alzados Norte y Sur. El alzado Norte, donde se encuentran las galerías de acceso a las viviendas, está acabado con un cerramiento de módulos de chapa galvanizada deployé. El alzado Sur, presenta una solución con fachada ventilada por dos tipos de materiales diferentes separados entre sí unos centímetros. La cara exterior está acabada íntegramente en paneles composite de aluminio; mientras que la hoja interior es de ½ pie de ladrillo.
Interior
El programa solicitado para el edificio es de tan sólo un dormitorio, un baño y un salón comedor con cocina. Las viviendas se plantean con doble orientación de manera que siempre sean pasantes de esta forma se asegura la ventilación cruzada, la captación máxima de soleamiento, así como la fachada y cubierta ventiladas responden a criterios de eficiencia energética. La doble piel ventilada, opaca y clara evita el sobrecalentamiento y pérdida calorífica como el comportamiento higrotérmico óptimo de las viviendas.
La galería que proporciona acceso a las 106 viviendas económicas y sostenibles se encuentra en el lado norte del edificio, presentando una piel transpirable compuesta por módulos de chapa galvanizada deployé y huecos abiertos al exterior.
Las viviendas que se encuentran en este lado tienen vistas hacia un patio interior y están visualmente protegidas del pasillo de acceso por mamparas de vidrio traslúcido, que también sirven para colgar la ropa. En cuanto a la fachada orientada hacia el sur, las habitaciones cuentan con amplios miradores protegidos de la radiación solar directa por medio de lamas que funcionan como brise soleil. Esta disposición garantiza un adecuado confort térmico y visual para los residentes, al tiempo que promueve la eficiencia energética del edificio.
Se propone dotar al edificio de 106 viviendas económicas de una lavandería común ubicada en la planta S1 (nivel -02.00m) dentro de uno de los espacios destinados a uso comunitario. Esta decisión ofrece a los residentes la flexibilidad de disponer de más espacio en la cocina, ya que tienen la opción de elegir entre instalar una lavadora en su vivienda o hacer uso de la lavandería común, lo que resulta especialmente beneficioso en viviendas de tamaño reducido.
La distribución de las 106 viviendas economicas se organiza de manera lineal, colocándolas una al lado de otra, siguiendo un orden riguroso que recuerda a una formación militar. Esta disposición no solo optimiza el espacio disponible en la parcela, sino que también refleja una clara vocación por la producción en serie, la estandarización de los elementos constructivos y la eficiencia en los procesos de construcción.
Este enfoque permite abaratar costes y agilizar los tiempos de construcción al emplear sistemas prefabricados y estandarizados. Además, facilita la integración de sistemas pasivos de eficiencia energética en el diseño arquitectónico, como la orientación de las viviendas para aprovechar al máximo la luz natural y la ventilación cruzada, reduciendo así el consumo de energía y mejorando el confort de los residentes.
La lavandería común, ubicada en la planta subterránea, ofrece una solución práctica y conveniente para los residentes, que pueden optar por utilizar este servicio en lugar de instalar una lavadora en su propia vivienda. Esto no solo reduce el consumo de agua y energía asociado al lavado de ropa, sino que también contribuye a fomentar la vida comunitaria y el intercambio entre vecinos.
Conclusion
En resumen, la inclusión de una lavandería común y la distribución eficiente de las viviendas en el edificio de 106 viviendas económicas son ejemplos de cómo el diseño arquitectónico puede contribuir a mejorar la calidad de vida de los residentes, promover la sostenibilidad y optimizar el uso del espacio disponible en entornos urbanos densamente poblados.
