La Plaza Valeras en Aranjuez, se erige como un espacio de promoción privada
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Colindante con la Plaza de Parejas y en las proximidades del Palacio Real. Esta plaza triangular se desarrolla sobre un aparcamiento subterráneo, integrando una trama cartesiana que combina áreas verdes, zonas de tránsito y espacios de estar. En este contexto, se articulan elementos como comunicaciones verticales, conductos de ventilación y accesos viales, vinculando la infraestructura subterránea con el entorno urbano.
El futuro de los cascos históricos monumentales como el de Aranjuez, que debiera servir de modelo para otras ciudades europeas o en su defecto copiar de ellas, pasa por limitar lo más posible la movilidad motorizada, fomentando el uso de otros medios más saludables y sostenibles. El dicho de que “el automóvil devora la ciudad”, cobra cada vez más fuerza en la medida que se fomente y facilite su uso, vías rápidas o de alta capacidad y aparcamientos subterráneos son sus mejores promotores, siempre en contraposición o conflicto con peatones, ciclistas, transporte público y residencial.
Fomentando la Vida Urbana y la Sostenibilidad
El desarrollo de la plaza Valeras Valeras busca potenciar las relaciones humanas entre los habitantes, comerciantes y visitantes de Aranjuez, convirtiéndose en un punto de encuentro y convivencia en el corazón de la ciudad. En un momento en que la movilidad motorizada amenaza la calidad de vida en los cascos históricos, esta iniciativa busca contrarrestar el impacto negativo del tráfico, promoviendo alternativas más saludables y sostenibles.
El Desafío de la Movilidad Sostenible
En este contexto, surgen preguntas acerca de la viabilidad de proyectos que priorizan la movilidad sostenible en Aranjuez. ¿Qué alternativas existen para promover un tráfico más respetuoso con el medio ambiente en la ciudad? El movimiento de las ciudades lentas, o Citties-slow, propone soluciones que permitan a los ciudadanos disfrutar plenamente de su entorno urbano de manera fácil y agradable. En contraposición al uso del vehículo en el centro urbano, estas iniciativas buscan mitigar problemas como los atascos, el ruido y la contaminación atmosférica.
El Desafío de la Sostenibilidad Urbana
El proyecto de la plaza Valeras originalmente concebido como un aparcamiento subterráneo y una plaza ajardinada se enfrenta ahora a desafíos de abandono y falta de mantenimiento. La transición de la Plaza Valeras de un espacio verde prometedor a una zona marcada por la desidia y el vandalismo plantea interrogantes sobre la gestión y conservación de los espacios públicos en la ciudad.
El Ayuntamiento de Aranjuez se enfrenta al reto de revitalizar y preservar este importante enclave urbano, garantizando su funcionalidad y disfrute para las generaciones futuras. Teniendo como objeto principal que el aparcamiento y la Plaza Valeras en Aranjuez en Madrid actua como elemento vertebrador de Aranjuez para fomentar las relaciones humanas entre ciudadanos, vecinos y comerciantes ocupando las calles, paseos, plaza y jardín.
El movimiento de pequeñas ciudades Citties-slow (ciudades lentas), en su manifiesto alude a “Vivir bien significa disponer de soluciones y servicios que permitan a los ciudadanos disfrutar de modo fácil, sencillo y agradable de su propia ciudad”. El vehículo en el centro de las ciudades es muy ineficiente, con atascos constantes y graves problemas de ruidos y contaminación del aire, aun así, ¿existen otras opciones o alternativas a los proyectos aludidos, que puedan justificar la movilidad sostenible del tráfico en Aranjuez?
Se pensó en crear este aparcamiento subterráneo y en superficie una plaza jardín que diera cierto verdor ante la desolada y árida Plaza de Parejas. Al ser una promoción privada, la plaza quedo totalmente abandonada, sin mantenimiento alguno por parte del Ayuntamiento de Aranjuez, siendo objeto de botellones y suciedad pasando a ser de la idea de plaza jardín de la Plaza Valeras a una plaza de escasa vegetación silvestre y tatuada de grafitis.
Conclusiones: Hacia una Ciudad más Vibrante y Sostenible
La Plaza Valeras en Aranjuez representa un microcosmos de los desafíos y oportunidades que enfrentan las ciudades en su búsqueda de una movilidad sostenible y una vida urbana vibrante. Es crucial que las autoridades municipales y los ciudadanos trabajen juntos para revitalizar y mantener estos espacios públicos, promoviendo la convivencia, el cuidado del medio ambiente y la calidad de vida de todos los habitantes de Aranjuez.
La Plaza Valeras en Aranjuez, al ser privada, no recibió el mantenimiento municipal necesario, lo que la llevó al abandono y deterioro. El Ayuntamiento de Aranjuez no se responsabilizó de su conservación, lo que contribuyó al estado de ruina actual. La responsabilidad de la falta de mantenimiento y conservación de la Plaza Valeras en Aranjuez recae en la propiedad privada, que no cumplió con las labores necesarias para preservarla, contribuyendo así a su degradación.